Quiero aprovechar el hilo de los últimos artículos para compartir mi sentir y lo que he experimentado en una Orden Iniciática, sobre los Maestros y Aprendices.
La verdad es que si hace años me hubiesen hablado sobre la existencia de una Logia virtual, pues nunca me lo habría imaginado.
¿Cómo trasladar un espacio físico a una pantalla?, ¿Cómo crear un Egregor entre seres que algunos conoces, otros no y muchos que ni siquiera sabes que existen porque nunca se han pronunciado? ¿Cómo consigues exaltar a un Hermano a otro grado cuando entiendes que has conseguido que la Orden o la Logia entre en él y no que él haya entrado a la Orden o a la Logia?
Bueno, pues DDLA a lo largo de estos años me ha demostrado que es posible crear la Consciencia que da una Iniciación. Puede que en algunos aspectos se pierda cierta magia que da el participar de una Iniciación, sea propia o ajena, pero también tengo que decir que, a nivel esotérico, de entendimiento y comprensión de energías la evolución es mucho más rápida y efectiva.
En una Logia física, los Maestros suelen “dejar caer” o dejar un mensaje entre líneas para aquél que está más espabilado y atento, a diferencia de que en esta Logia como lo es DDLA, pues puedes revisar una y otra vez lo que se dice y lo que se calla hasta que por cansancio nos entre.
Las aportaciones que cada uno hace, en este caso sería a través de los comentarios, es la manera que el Venerable Maestro, El Primer Vigilante y el Segundo Vigilante tienen de poder medir el nivel de aprendizaje de los Aprendices y Compañeros.
Para situarnos y hacer memoria, los Aprendices son los que recién entran en la Logia y tienen como ley el “silencio”. No es que tengan prohibido el poder manifestarse, pero como recién iniciados o llegados, antes de emitir opinión alguna estando en un estado de ignorancia respecto a la dinámica, temas y funcionamiento de la Logia, pues simplemente se le invita al silencio y a la contemplación. Esto es muy importante, porque requiere de gran atención y dominio de las emociones, endo y exo energías.
Cuando el Aprendiz ha demostrado contener sus pasiones al expresarse, poniéndose al orden, que se hace con el gesto de poner el brazo en escuadra, la mano también en escuadra apretando su garganta con el pulgar, simbolizando así el dominio de sus pasiones (Endo y Exo Energías), pues ya está preparado para pasar al siguiente grado, el de Compañero.
Una vez ya el Compañero experimenta distintos viajes y salidas de la Logia madre, visita otras Logias, Órdenes, Escuelas, culturas, etc., es que ya ha adquirido la madurez necesaria, experiencia, conocimiento y el equilibrio emocional para poder acceder a la Maestría.
La figura del Maestro es necesaria porque Si o Si, para recibir una verdadera instrucción el Maestro tiene que llevarte siempre al límite de tus capacidades, ya sean mentales, espirituales, de creencia, energéticas, etc. El Aprendiz necesita que el Maestro le saque los colores, le ponga colorado y si es necesario le haga llorar.
En el caso que nos compete, un Maestro conoce lo que hay, conoce a los enemigos, visibles y muy bien a los “invisibles”. Conoce a los Guardianes del Portal, los ha enfrentado, ha salido derrotado y ha salido victorioso…. No les teme, pero los respeta porque sabe que su poder es tal que, si no está uno debidamente protegido, seguramente su Consciencia quedará perdida en el limbo dimensional, funcionando en modo automático hasta sus últimos días como contenedor o Unidad de Carbono carente de consciencia. En otras palabras, pasará el resto de su vida ingresado en un psiquiátrico y es así de real.
Deben entender y comprender que cuando Morféo manifiesta su preocupación e incluso malestar, es porque una vez el Portal se abrió, ya no hay manera de cerrarlo y así como uno puede moverse libremente en muchos planos, también estos seres pueden manifestarse incluso en lo físico y la verdad no es nada agradable.
Ante todo, El Maestro va a velar por la seguridad suya, de su Templo y de sus Miembros, sin importar quién sea, porque el Maestro conoce y aceptó la responsabilidad de tal envergadura, porque es el Padre que tiene que cuidar su legado y permitir que éste continúe.
Sólo me queda agradecer a nuestro Venerable Maestro Morféo las veces que nos ha puesto a prueba, en lo mental y en lo emocional porque un verdadero marinero no se hace en aguas pacíficas…
No se confundan, muchos pueden ver rudeza e incluso una actitud ofensiva…. Y es todo lo contrario, es una acto de Consideración al prójimo y acto de A.M.O.R ejecutada desde un ánimo particular de enseñar, por las buenas o por las malas, pero de dejar una enseñanza que nunca debemos olvidar, por nuestra seguridad y la de los nuestros.
Nadie, nunca miró a su padre como un malvado enemigo la vez que le golpeó la mano después de decirle diez veces que no se meten los dedos en los enchufes… Sólo el tiempo y nuestra madurez, nos permitió ver el amor que nos tuvo a través de ese golpe en la mano, en ese momento justo.
Por último, dejo una reflexión sobre La Maestría del Dr. Jorge Adoum
“El Tercer Grado es el símbolo natural de la perfección Humana, que se consigue por medio del desarrollo personal y por el triunfo sobre todas las debilidades humanas.
Maestro- en latín Magister- significa el más sabio, más elevado y bueno.
No se trata como cree la mayoría, de un grado o un título concedido.
Ser Maestro es ser un superhombre, intelectual y espiritualmente. Ser Maestro es poseer la cualidad de conquistar por propio esfuerzo la suprema autoridad que barrió la ignorancia, el egoísmo y el miedo, los cuales mantienen al hombre en un estado de inferioridad y esclavitud.
El tercer grado, el de «Maestro Masón», es el grado de la Exaltación por el merecimiento, no obstante, sin ese merecimiento y esfuerzo, nadie puede ser maestro, aunque lo exalten diez veces al día o le otorguen cien diplomas.”
He dicho,
Helimer.·.